El primer de trabajo en el nuevo puesto ha pasado y debo decir que sin novedad. He aprendido nuevas habilidades y he observado los viejos malos hábitos de la empresa y de sus empleados. Me atrevo a decir que he superado las expectativas de mis superiores y he aprobado la prueba. En cualquier caso el puesto al que estoy destinado desaparece un mes al año, en agosto, y me voy a pasar ese mes en la central provincial de la empresa. Sí, esa que hay a dos calles de casa.
El paso a la central incluye dos beneficios, primero la comentada distancia que se reduce de cuarenta y cinco a diez minutos por trayecto. Luego que la oficina en el borde exterior aglutina todos los servicios mientras que la central los tiene separados. Esto quiere decir que mi trabajo se vuelve más mecánico y más sencillo aunque se preve un mayor volumen de trabajo. Veremos que tal se me da.
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