La verdad es que se me hab�a ocurrido escribir una entrada sobre las cosas que tengo encima de la mesa pero me he acordado de aquel ejercicio de lengua espa�ola que tan mal qued�. Se trataba de describir nuestro cuarto y lo m�o al parecer quedo como un mero listado de objetos, como un catalogo de tienda cutre.
Y recuerdo algunos detalles de la an�cdota como al profesor, el curso y a la persona que tuvo el honor de compartir mi �ltimo puesto con un ejercicio que estaba muy lejos de los que describian zapatos bostezando debajo de la cama. Sinceramente pensaba que describir mi cuarto era enumerar los objetos dando cuenta de su n�mero, caracter�sticas y ubicaci�n espacial.
Si puedo decir que sobre la mesa tengo un mont�n de cosas sin prop�sito pr�ctico. Y puedo destacar por encima de todas el marcap�ginas del �ltimo libro que le�. Un recuerdo doloroso de que d�as despu�s no he comenzado ning�n otro.
2 comentarios:
Yo odio terminar un libro un viernes, porque como no tenga tiempo de ir a la biblio o no tenga un libro esper�ndome en casa, me entra un desasosiego...
Menos mal que, rebuscando, he encontrado "La voz dormida", de Dulce Chac�n y lo he empezado.
�Guardas esa redacci�n? �Qu� contaste para que saliese tan mal?
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