27 septiembre 2006

Libros electrónicos

El futuro a medio plazo son los libros electrónicos.

Ya lo se, a vosotros os gusta el papel, el olor de la tinta, el tacto de las páginas y esas portadas tan chulas. Os gustan los marcapáginas y poder decir «¡Que tocho!» cuando cogéis un libro de más de mil páginas. Pero todo pasa y o nos adaptamos o nos morimos.

Los libros electrónicos son todo beneficios para la industria. Se ahorran el la mitad del proceso editorial, la impresión, la distribución y el minorista. Y es la mitad más cara. El precio tiene tendencia a mantenerse, curiosamente. Pero para el lector el libro electrónico también tiene ventajas, la primera es que no ocupa espacio y en los futuros pisos de 75 metros cuadrados el libro no tiene sitio. La primera es la única ventaja si la industria se sale con la suya, si no es así además tendremos libros de bajo coste o regalados (aquellos cuyos derechos de publicación caducaron) y posibilidad de duplicar o prestar los libros con sencillos procedimientos como el correo electrónico.

Pero nobleza obliga y bajeza también, las empresas quieren crear un modelo de negocio que no se sostiene por lo absurdo. Te venden el lector de libros por 350 € y luego pretenden que pagues por libros que, como ya he comentado, no podrás imprimir, ni prestar o distribuir ni nada. Hasta se plantea colocar un límite de lecturas.Y así no va a funcionar. Seamos sinceros, lo primero que va a pasar es que los sistemas de protección serán reventados y la gente copiara los libros como las películas o la música. Y lo segundo que por esos precios va a ser más accesible una PDA que tiene una pantalla menor pero muchas más funciones (una pantalla menor puede ser una ventaja).

Así que mientras la empresa quiera mantener el modelo de cobrar por leer el libro electrónico no tendrá el despegue que se merece. En un lector electrónico sería posible llevar doscientos cincuenta mil libros. Más de una biblioteca pública palidecería ante semejante colección.

1 comentario:

Meg dijo...

Llevas mucha razón en lo que dices.

Cometí el errror de comprar un libro electrónico de una materia un poco difícil (La responsabilidad patrimonial de la Administración Pública: el nexo causal) y me "soplaron" 15 euros y pico por un librito de unas 80 páginas. Sólo he podido imprimirlo una vez y el archivo que grabe como *pdf no existe realmente en mi ordenador (aún no sé cómo lo han hecho).

Si llego a saber todo esto, me lo fotocopio en la biblioteca y me gasto 3 euros.